Maléfica

- Maléfica: No está bien robar pero no matamos a la gente por ello.

MALÉFICA

Maléfica pensó en cómo Stefan, no teniendo nada, había tirado su anillo para que sus manos pudieran volver a tocarse y su corazón se conmovió. Así, el joven ladrón que había intentado robar una gema robó algo mucho más valioso.

Stefan y Maléfica se convirtieron en insólitos amigos. Y, durante un tiempo, pareció que, al menos entre ellos el ancestral odio entre los hombres y las hadas había sido olvidado. Como ocurre en algunas ocasiones, la amistad se transformó en algo más. El día de su decimosexto cumpleaños Stefan le hizo a Maléfica un regalo. Le dijo que era un beso de amor verdadero. Más probaría no serlo.

MALÉFICA

- Maléfica: ¡No os acerquéis más!

- Rey Henry: Un Rey nunca acepta órdenes de un elfo alado

- Maléfica: Tú no eres un Rey para mí

MALÉFICA

- Diaval: Pídeme lo que necesites

- Maléfica: Alas, necesito que seas mis alas

MALÉFICA

- Maléfica: La princesa crecerá llena de gracia y belleza, y cuantos la conozcan la amarán

- Reina Flor: Es un hermoso regalo

- Stephan: No lo hagas

- Maléfica: Pero, ¡antes de que se ponga el sol en su decimosexto cumpleaños se pinchará el dedo con la punta de la aguja de una rueca y caerá en un sueño tan profundo como la muerte. Un sueño tan profundo del que jamás despertará!

- Stephan: Maléfica, no lo hagas, te lo suplico

- Maléfica: Me gusta que supliques, repítelo.

- Stephan: Te lo suplico

- Maléfica: Está bien. A la princesa le concedo poder despertar de su sueño mortal, pero sólo con un beso de amor verdadero. ¡El hechizo perdurará hasta el fin de los tiempos, ningún poder terrenal podrá cambiarlo!

MALÉFICA

- Maléfica: Eres tan fea que casi me das pena

MALÉFICA

- Aurora: Sé que estás ahí, no tengas miedo

- Maléfica: No tengo miedo

- Aurora: Deja que te vea

- Maléfica: Entonces tendrás miedo tú

MALÉFICA

- Aurora: Se quién eres

- Maléfica: ¿Lo sabes?

- Aurora: Eres mi hada madrina

- Maléfica: ¿Qué?

- Aurora: Mi hada madrina, me has protegido toda mi vida. Siempre he sabido que estabas cerca.

- Maléfica: ¿Cómo?

- Aurora: Tu sombra, me persigue desde que era pequeña. Vaya donde vaya tu sombra siempre me acompaña.

MALÉFICA

- Diaval: Ese joven es la solución

- Maléfica: No Diaval

- Diaval: Si, un beso de amor verdadero rompe el hechizo

- Maléfica: ¿De amor verdadero? ¿Tú todavía no lo has entendido? Eso no existe, por eso utilicé esa maldición.

MALÉFICA